martes, noviembre 27

Cambios



"Agárrate"
Aniak, AK
Noviembre 2007


Poco a poco las cosas van cambiando y tomando una forma más definida para nosotros en esta esquinita salvaje del planeta. Todos los cambios están siendo positivos y hoy ya sé que el día que la vida me lleve a otro lugar, echaré de menos este pueblito perdido en la tundra de Alaska, mi hermosa cabaña, y la vida tan diferente que estoy llevando.

Uno de los cambios más curiosos estos días está siendo mi relación con el frío. Hasta hace muy poco, cero grados me parecía un frío de carallo. Hoy en día cero grados son, como dice el dicho, ni frío, ni calor. Salgo a por leña con una chaquetita fina a cero grados y ya no percibo el frío. Al contrario, me parece una temperatura fresca y agradable. Que curioso, ¿no?

Otros cambios sorprendentes y de los que estoy muy agradecida, los ha traído consigo mi racha social de las últimas semanas. He conocido a una chica que trabaja en la farmacia del pueblo y para mi gran deleite resulta que es masajista. Quién iba a imaginar que en Aniak íbamos a ser dos las masajistas, y que se me fuese a abrir una puerta a la posibildad de intercambiar masaje y cuidarme de esa manera. Como si se me apareciera un angelito, de esos que ayudan a que las experiencias polares sean positivas. Nos convencimos mutuamente al primer contacto y ahora todos los domingos nos encontramos en mi casa. Un domingo ella recibe masaje y al domingo siguiente lo recibo yo. Del masaje salimos directamente a la sauna calentita que ya nos tiene preparada David como preludio a la que luego se toma él. Eso sí, mucho más caliente que la nuestra. Tanto que yo la definiría casi como masoquista.

Por si encontrarla a ella no hubiese sido poco, resulta que esta chica vive con un hombre que además de ser un tipo muy majo y con pinta de poder llegar a ser un buen compañero de aventuras, especialmente para David, también es un manitas de la construcción y por lo que parece, uno de los pocos hombres a los que no les cuesta semanas y semanas plantearse el hacer unas chapucillas aquí y allá para otra persona en el pueblo. Algo no muy frecuente en Aniak, la verdad. Nuestra aventuras con dos supuestos fontaneros del pueblo dan como para dedicarles una entrada aparte. Así que siendo novatos en Alaska, encontrar a alguien que sabe hacer de todo en una casa y además es amigo es como encontrar otro angelito.

Y ya que va la cosa de angelitos, no puedo dejar de mencionar a Zaden (pronunciado Seidan), su hijo de 17 meses. Es un amorcito de niño que gorgojea todo el rato como un pajarito y se te echa a los brazos a la primera de cambio. Todo un regalo para sus padres, y ahora también para Naím. Esta semana hemos descubierto que se llevan estupendamente y Zaden ya se ha pasado un par de tardes en casa.

Así que poco a poco vamos creándonos una pequeña y variopinta comunidad alrededor. Sin ella, sería mucho más dificil pasar aquí el invierno. Un invierno que de vez en cuando nos regala días frescos y agradables, a cero grados.

¡Cómo son los cambios! El miedo que nos dan a veces... ese famoso miedo a lo desconocido. Y luego te das cuenta que una vez que decides vivirlos estando realmente presente, cuando menos te lo esperas te acostumbras a ellos y acabas percibiéndolos como positivos en tu vida.

Desde luego, los humanos tenemos una capacidad de adaptación increíble, nos acostumbramos a cualquier cosa, por imposible que nos parezca antes de vivirla. Y menos mal que es así.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Estupendo post lleno de positivismo. ¡Cuanta razón tienes en los de los cambios! A mí me pasó algo parecido, aunque en mi caso los cambios fueron mucho menores.
Por cierto, preciosa foto.

Marinha de Allegue dijo...

Concordo coas túas palabras. A capacidade de adaptación é enorme o caso é querer adaptarse. Os cambios nun principio "asustan" e finalmente disfrútanse.

Unha aperta grande grande.
:)

Rocio Ramos Morrison dijo...

que gusto oirte tan llena, positiva y hermosa!!Me encanto la foto. Me alegro mucho por tus nuevos amiguitos. Un abrazo enorme

irene dijo...

que bueno que tus manos masajistas y estupendan vuelvan a ponerse al servicio de la humanidad...me da la sensacion de q en alaska te estas haciendo una cacho de mujerona...vamos q del norte vaya...de mas arriba de bilbao incluso aiba pues!!!
ni frio ni calor....tia cachonda!
te adoro la cosita

Anónimo dijo...

Hermoso escrito y foto preciosa!

Cuanto me alegro por los nuevos tesoros que han aparecido en tu vida - buenos amig@s, el placer de intercambiar masajes, el darse cuenta que algun dia echaras de menos al sitio donde estas ahora.... y mejor aun, el tesoro de comprender, a traves de algo tan omnipresente y palpable como la temperatura del aire que te rodea, la propia capacidad para adaptarse a cosas que nunca te imaginaste posible!!

No seria esta comprension la verdadera "fuente de la juventud" que tanto se busco en el nuevo mundo?

Un abrazo gigante :-)

Zozo dijo...

Hi Miraim! You are a very talented photographer. Your photos on flicker are soo cool. You have a sharp eye and are familiar with photoshop no? I want to learn more. Love to you. Wish I spoke Spanish :-) Love Zoey

Lorena Muñoz dijo...

preciosa foto.

Meiga en Alaska dijo...

Gracias a todas por los comentarios y el cariño. Muchos besos.
Kisses to you too Zozo, even if you don't understand Spanish :)

ana p. dijo...

Estoy leyendo un libro que lleva persiguiendome meses y que me he rendido a leer para dejar de encontrarmelo.
en el basicamente se habla del hecho de que creamos con nuestros pensamientos y palabras la vida que vivimos. En tu caso, estas creando una vida plena y llena de experiencias enriquecedoras y positivas. Has dado la vuelta a la queja y al miedo y ahora aparecen las cosas que acompañan el nuevo modo de pensar y sentir.... Sin miedo la suerte va contigo, como dice la canción.... Suerte o ley de la atracción????
Mil besos. Te quiero

mirada dijo...

Me está gustando mucho leerte. Muchas gracias por llegar hasta mi. Un beso. (ni frio ni calor... ay madre... )

paideleo dijo...

Gustoume este blogo dunha galega en Alaska.
Eu botei tres anos en Carolina do Norte e podo entender muitas das situacions polas que pasas.
Que eses anxinhos te acompanhen en Anaik.